19 octubre, 2005

La Espera

Cuatro estaciones

“llegas caminando y no sabes tu destino...”, Caifanes.

“Recuerdos de infancia, siluetas que acaparan la atención de muchos pequeños que ya sientes que te rodean. Corres pero no es suficiente, moscas nietzschanas vuelan por doquier.
Figuras mecánicas potencian tu caminar errante pero festivo, por que la sombra que hay sobre ti es de luces, y posee olor a fiesta que se deposita en tu memoria a medida que registras cada instante de placer, de aquellos que crecemos sabiendo que solo duran una caída de sol. Ese ocaso, transformado en eterna expectación cuando te pasaste horas esperando a que los rieles cantaran su venida, presencia perdida mientras la inocencia perfilaba con esa fotografía.
Ahora, el sol te cubre totalmente y, movimientos estáticos se hacen eternos en tu inmensa paciencia: tu propia resignación de saber que este año será como el anterior, y que tendrás que volver como ayer, y que quizá unas cuantas gotas de agua detengan la sangre que corre por tu alma y –deseando– que una dulce conquista de sueños te acompañe mostrando lo que nunca será, lo que nunca verás, por que ocurre todas las noches, un grito cronometrado, un segundo.
Pensando en tu cuarto oscuro en medio de la nada, perdido, a la espera de tu condena mientras miras al infinito sabes¡ que aun eres, pero el frío ya amenaza tu quietud y lentamente despiertas junto a tu pasado.  Sabes¡ que ya no puedes dormir, porque otra cita onírica sería el fin, tus cansados gestos te deparan inevitable desgracia. Lo inevitable en la recepción de la nota, mensaje enviado por Hades a tu espíritu vacío y que invita a tu burbuja al sueño eterno...”

(")

(Altamira, 2003).

1 comentario:

damiatron dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.

Season II - Cerrar puertas / “lo pendiente”

Finalmente, simbolismos. Preguntas sin respuesta, Espacios, que no habían sido habitados, Por lo menos hace mucho. Difícil tarea, Re-...